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El océano impulsa industrias que van desde el turismo y la biotecnología hasta la energía limpia y los productos farmacéuticos. Pero el cambio climático, la contaminación y la falta de financiación ponen en riesgo su futuro.

La jefa de ONU Comercio y Desarrollo pide la colaboración del Grupo de los 20 para salvaguardar el crecimiento mundial y la prosperidad compartida.

El comercio y la innovación han impulsado su crecimiento, pero los crecientes riesgos climáticos, la débil gobernanza y la falta de inversión amenazan el futuro del sector y la vida de 600 millones de personas en todo el mundo.

A medida que la presidencia del G20 pasa de Indonesia a India, Brasil y ahora Sudáfrica, el Sur Global se ha situado a la vanguardia de la configuración del comercio internacional y la cooperación económica.

Dependencia de materias primas, alta deuda e infraestructura insuficiente vuelven más vulnerables a las economías africanas. Redes comerciales sólidas y diversificadas pueden fortalecer su resiliencia y estimular el crecimiento.

Un comercio intrarregional más fuerte, inversiones estratégicas y reformas económicas más audaces son cruciales para liberar el vasto potencial del Área de Libre Comercio Continental Africana.

El fuerte descenso de la financiación internacional de proyectos genera preocupación sobre la financiación del desarrollo sostenible y resalta la necesidad de que los países diversifiquen sus estrategias para atraer y mantener la inversión.

Se calcula que la inversión extranjera directa se redujo un 8% en 2024, lo que supone un reto para el progreso de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, que dependen en gran medida de la financiación internacional de proyectos.

Escrito por Rebeca Grynspan, Secretaria General, ONU Comercio y Desarrollo (UNCTAD)

Un nuevo análisis desvela cómo los pequeños Estados insulares en desarrollo están aprovechando los océanos para la acción climática, y pide más apoyo mundial para acelerar el impulso.